domingo, 16 de marzo de 2008

DOMINGO DE RAMOS

Hay ciertas coincidencias a lo largo de nuestras vidas de las cuales no nos percatamos hasta algún tiempo después, en mi caso, son tres coincidencias sobre una misma circunstancia: morir.

La primera de ellas sucedió un 1 de diciembre del 2005 cuando al llegar del trabajo mi perro agonizaba, le habia comprado una medicina que mi hermano (que es veterinario) me dijó le serviria, lo unico que podia hacer era ayudarlo a no sufrir más...

La segunda, fue apenas unos meses después en un domingo de ramos, la madrugada de ese día tuvé un accidente que me acerco en riesgo muy ligeramente a la muerte y ya en la mañana fui al trabajo a reportarme avisando que iria a urgencias, el daño fue basicamente en la cara, el golpe más fuerte que he recibido y que me afectó la respiración al grado que si duermo boca arriba me resulta dificil respirar... llendo al seguro tome un trolebus y justo en el iba mi Madre que por el golpe en la cara no me reconoció... me acompañó a urgencias, y lo clasico, de ahi me mandarón a un hospital algo retirado, pero antes pasamos a una iglesia, ella compró su ramito y esperamos a que lo bendicieran sólo que tardaban y mi Madre consideró que era prioritario ir al hospital, asi que nos fuimos... de alla me mandarón a traumatología... finalmente me atendierón, me sacarón radiografías, me revisarón, me incapacitarón y me medicarón.

Después me acompañó a la casa. A pesar de que nos dolió mucho perder a Pucho apenas unos meses antes, sin querer nos encariñamos con un pequeño pajaro que Rocio encontró en la calle hacia exactamente un mes (9 de febrero) y que al darse cuenta de que aún no sabia volar lo llevó a la casa... y ese 9 de abril del 2006 al llegar me dijeron que por accidente fue pisado y murió, mi Madre me vió llorar y en ella noté una extraña expresión, por segunda vez la muerte rondaba mi entorno.

El siguiente domingo de ramos, el del 2007, en la madrugada en un hospital de urgencias mi Madre moriria, sólo que ese domingo de ramos caia en 1 de abril, nuevamente ella no tendria tiempo para bendecir un ramito, la ultima vez que vió lagrimas en mis ojos fue justo en el domingo de ramos del año anterior y todavia recuerdo su expreción...

Asi de un 1 de diciembre, a un domingo de ramos y después otro domingo de ramos que cayó en un 1 de abril, morir fue una circunstancia que rotó entre tres puntos de mi vida, acercandome a la muerte de tres seres que estuvierón a lo largo de distintos lapsos en mi vida y que inclusó me acercó a mi propio fin... que coincidencia.

Hoy nuevamente domingo de ramos llevamos dos ramos a bendecir, uno para nosotros y otro para Doña Lupe... y sé que si ella viviera y estuviera bien nos habria acompañado... y de cualquier forma la realidad es que nos acompañó muy dentro de nuestros corazones y estuvó con nosotros presente en nuestro pensamiento, tal como en todos estos días desde que partió.

Los extrañamos Doña Lupe, Pichin y Pucho... viven en nosotros.

No hay comentarios: